«Ten cuidado con lo que sueñas, porque se puede cumplir«.
No se me ha ocurrido una mejor entrada para este post. Porque si, hay veces que se cumplen.

Y os voy a contar una historia de alguien a quien le pasó.

Erasé una vez una chica soñadora, con miles de inquietudes y con esa sensación en el interior de que aún no había encontrado ese » algo muy importante » que le tocaba hacer en la vida. ¿Sabéis de lo que os hablo?

Dicen que la locura se encuentra en algún lugar entre el kaos y tener un sueño. Quizá sea así…

De hecho muchas veces la tacharon de eso, de loca.

Hace un tiempo, esta chica empezó a seguir por las redes sociales a una mujer, instructora y atleta que le maravillaba.  Escritora también ; se compró su libro.
Y era un libro de esos que te remueven por dentro, que te tocan algo que hace que vuelvas a recordar ese «algo muy importante» que necesitas hacer en la vida. Un libro que motiva, que empuja y que recurres a él muy a menudo para volver a sentir todo eso.

A nuestra protagonista le apetecía mucho conocer el lugar  donde impartía clases esta gran mujer, y quería vivir uno de esos entrenamientos de los que tanto estaba empezando a oír.
¿ Y por qué no?

Era diciembre; compró un billete de avión para un miércoles con llegada a Barcelona a las 10 am y salida hacia su lugar de residencia ese mismo día a las 20 pm. Ese viaje y el entrenamiento que iba a hacer fue su «auto regalo» de cumpleaños. ¡ A mi no se me hubiera ocurrido un regalo mejor!

Volvió a casa con su libro firmado y feliz de haber podido vivir aquello en esa sala tan especial, tan distinta, tan auténtica…

2 años después, esa chica ha formado parte de la primera formación del método «Magalitrainbetter«.  Forma parte de las pioneras y valientes «Magalitrainers» que habrá fuera del templo, fuera de la Sala Magali.

18 horas de sudor, esfuerzo, sacrificio, dolor, risas, superación, lágrimas de emoción e increíble voluntad.

3 días de amistad, compañerismo y unión.

Sesiones en las vuelves a sentir por qué eres deportista.

Jornadas de las que te vas formando parte de una nueva familia.

Solo 5 elegidas para esta formación…, y allí estaba ella. Esa chica que leía con admiración el libro de Magali Dalix, hoy es parte de esa gran familia que forman todos los que hacen que La Sala Magali sea lo que es.

Porque deporte no es sólo hacer ejercicio; deporte es sentir, es emoción, es ser fuerte, es superarse, es VIVIR!!